sexta-feira, 15 de abril de 2016

La clave, ahora, es la capa social de la tecnología - Carlos Molina


Carlos Molina: "La clave, ahora, es la capa social de la tecnología"


La percepción de que estamos en una etapa de crecimiento trae confianza, y la confianza anima a realizar cambios. Por eso se reactiva el debate de la transformación digital. Lo importante es que las empresas no sólo digitalicen sus procesos, sino que conviertan esta corriente en una mecánica constante que no se detenga en momentos de crisis y que pongan el acento, asimismo, en la capa social de las nuevas tecnologías.

Buena parte de las empresas españolas está afrontando el momento desde el desconcierto de más de cinco años de crisis en los que se ha paralizado la inversión, se han recortado presupuestos y se han concentrado en las estrategias de venta en el corto plazo, sin prepararse para un momento en el que tocaría crecer. Ahora se enfrentan a un doble reto. Por un lado, deben incorporar nuevas tecnologías que les permitan optimizar sus procesos, desde la cadena de suministro a la gestión de personas y equipos de trabajo. Por otro, tienen que reajustar la forma de pensar y adaptarla a un contexto que ha cambiado mucho en estos años.

Lo que encontramos ahora es un escenario marcado por la velocidad y por la mutación de empresas y marcas. Las organizaciones no son proyectos acabados, sino entes en constante transformación, con un core business en torno al cual todo es flexible.

Igual que en el mundo de las aplicaciones móviles no hay ninguna que se lance al mercado como un producto pulido e impecable, las empresas están aprendiendo a estar en una fase beta permanente, en la que nada es una verdad absoluta y todo se cuestiona para mejorarlo. Los procesos de mejora se realizan sobre la marcha y, gracias a las plataformas sociales, en colaboración con los propios consumidores.

En este escenario, la tecnología digital es importante porque permite mejorar el rendimiento gracias a sus posibilidades para recoger, analizar y cruzar datos. Pero sin una cultura social corporativa que ponga la importancia de la colaboración entre las personas (empleados entre sí, pero también empresa-clientes) por delante de los sistemas, corremos el riesgo de que estos esfuerzos se queden en meros alardes técnicos. Es el momento de transformar las reglas y atrevernos a desterrar una frase muy dañina: "Aquí siempre hemos hecho las cosas así".

Carlos Molina, Director de Contenido en Best Relations


Sobre Carlos Molina


Este periodista experto en comunicación off y online trabaja actualmente como director de Contenidos de Best Relations e imparte conferencias sobre comunicación digital en universidades y centros de estudio.